18 Oct Golosinas: Las 10 mejores de Argentina
La lista de golosinas que existe en nuestro país es casi interminable. Pocas cosas más difíciles debe haber que hacer dieta en Argentina!
Hay un kiosco cada dos cuadras y estamos constantemente tentados por miles de deliciosas golosinas.
Estas son las 10 golosinas consideras por muchos como las mejores!
1- Palitos de la Selva:
Estos caramelos masticables datan de la década de los ’50. Su sabor frutilla-vainilla se ve representado por sus colores rosa y blanco. Su original envoltorio trae adivinanzas sobre el reino animal. El preferido de chicos y grandes.
2- Bocadito Marroc
Este cuadrado macizo de praliné de chocolate blanco y leche es delicioso y un ícono de la cultura chocolatera. El Marroc es un clásico que no conoce edades.
3- Bananita Dolca
Esta golosina está hace décadas en los kioscos. Es un bocadito relleno con una suave crema de banana, bañada en chocolate.
4- Bon o Bon
Clásico de clásicos. Es un bombón relleno con pasta de maní, cubierto con una fina oblea y bañado en chocolate. Es la golosina emblema de la “Semana de la Dulzura”.
5- Vauquita
Una tableta de dulce de leche solidificado. Producto original y representativo de nuestro orgullo nacional: el dulce de leche! Simplemente Deliciosa.
6- Dos Corazones
La golosina del amor. Viene con un pequeño poema dentro y dos corazones dibujados sobre el chocolate. Ideal para compartir…o devorarlo solo!
7- Rhodesia:
Este clásico es una exquisita oblea rellena de crema y bañada en chocolate.
8- Pico Dulce:
El Pico Dulce logró traspasar las barreras generacionales y gustar a chicos y adolescentes. Este colorido chupetín tiene un sabor único que oscila entre el dulce y el ácido.
9- Cabsha
Es un bocadito con cobertura de chocolate negro y una fina galleta que se quiebra para dar lugar a su corazón de dulce leche, con un toque de licor que se desprende al morderlo.
10- Caramelos Sugus
Otro clásico que encontramos desde hace años en los kioscos.
Son caramelos masticables recubiertos porque una fina capa sólida del mismo sabor del caramelo. Vienen en una inconfundible cajita amarilla que al agitarla, suena como un sonajero.